jueves, 5 de abril de 2012

El lado oscuro de la tecnología es un puñetazo en el estómago.

Estamos rodeados de tecnología, la usamos a diario para comunicarnos, informarnos, conocer gente o compartir nuestros gustos.
Son muchos los buenos usos que la tecnología tiene, pero Black Mirror nos hace ver de una forma a la que no estamos acostumbrados la tecnología. Esta miniserie británica de 3 episodios independientes no deja indiferente a nadie, no sabría decir si para bien o para mal, al menos a mí me ha dejado impactada para bien. Los 3 episodios los he visto con admiración a la vez que me sorprendía de lo que estaba viendo.
No es la primera vez que el creador de esta serie, Charlie Brooker, consigue hacerme disfrutar de una serie a la vez que conseguía asombrarme, en Dead Set ya lo hizo (aprovecho esta mención a Dead Set para recomendarla a los que no la hayáis visto).

The National Anthem


Personalmente, mi episodio favorito. El comienzo ya es de por sí desconcertante: Una llamada al primer ministros británico para informarle de que la princesa Susannah, una famosa muy querida por el pueblo, ha sido secuestrada. ¿Qué tiene que ver el primer ministro? De él depende que la princesa vuelva sana y salva, ya que los secuestradores solo la soltarán si este tiene sexo con un cerdo en directo, en la televisión. Este al principio, se niega rotundamente, pero a medida que avanza el tiempo, se ve que la amenaza es real y que los secuestradores no van de farol. La gente opina sobre esta noticia en Twitter, Facebook, YouTube y demás páginas de Internet que todos conocemos. ¿Cuál es la decisión del Primer Ministro? La respuesta la sabréis si veis el episodio



15 Million Merits


Necesitamos ponernos en situación, una situación que me pareció muy posible en un futuro lejano (quizá no tan lejano, tristemente).
El deber de todo ciudadano es hacer ejercicio en una bicicleta y cuánto más ejercicio hagan, más méritos conseguirán, que serían dinero. Tanto como cuándo hacen ejercicio como cuándo están en sus habitaciones, las pantallas están presentes. Los méritos sirven para personalizar un avatar obteniendo más ropa o evitar anuncios en la tele.
Ese es el objetivo de todo ciudadano, salvo si tienes una gran voz y 15 millones de méritos. Si es así, puedes ir al "X Factor", el programa estrella que, si les gustas a los jueces del programa, ellos supuestamente te darán una vida mejor que el pedalear eternamente.
Esto es lo que le sucede a Bing, el protagonista, cuándo conoce a Abi y descubre la voz que ella tiene. Bing, que tiene 15 millones de méritos, la anima a entrar en este "X Factor".
Hasta ahí todo parece ir bien, pero las cosas se tuercen un poco...


The Entire Story of You


A todos se nos ha olvidado algo, ya fuera importante o no. No podemos retener todo en nuestra cabeza. Pues bien, este no es el caso.
En este "universo", la mayoría de la gente tiene implantado el "grano" detrás de su oreja. El "grano" permite grabar todos los recuerdos de la persona y reproducirlos cuántas veces uno quiera. Pero también permite proyectarlos en una pantalla y que los vea la gente y acercar o alejar determinados detalles.
Esto supone un problema para Liam, que tras una fiesta con los amigos de su mujer, empieza a sospechar de las miradas que le echa un tal Jonas a su mujer.
Liam acaba obsesionándose, reproduciendo una y otra vez esa escena para comprobar que hay detrás de Jonas y esa miradas que lo tienen paranoico.




Volver a comentar que son episodios independientes, aunque yo aconsejaría ver los 3. Personalmente, merecen la pena y se ve que la tecnología es buena, dependiendo para qué.

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