jueves, 26 de diciembre de 2013

Witches are the new vampires

Sí, como la familia, vuelvo a casa por Navidad. Ha pasado un tiempo desde que escribí, es lo que tiene empezar un nuevo curso y acostumbrarte a un ritmo distinto. Tampoco es que hubiese mucho para escribir. Más bien diría que me alegro de haber esperado un poco más para hablar de los estrenos que han llovido desde septiembre (que no son pocos) pero ahora se puede hablar más que de pilotos de medias temporadas o incluso de temporadas completas. Si hace unos años los vampiros tenían saturada la televisión, ahora son las brujas. Y debe ser impresión mía, pero este año veo demasiada gente guapa en televisión, ¡ni que todas las cadenas hubiesen fuesen la CW! Sin más preámbulos, he aquí como han resultado las nuevas series de este otoño 2013.

Sobresaliente:



Sleepy Hollow: Pues sí, para mí el mejor estreno del otoño. Quien me hubiera dicho a mí en mayo que esta sería una de las series que más esperaría cada semana. Sonaba a locura y los trailers no anunciaban nada especialmente llamativo, pero las apariencias engañan. Los casos procedimentales con toques sobrenaturales están muy bien llevados (algunos están demasiado conseguidos en el aspecto de dar miedo) junto con la química entre la pareja protagonista, Ichabod Crane y Abbie Mills, hace que sea una serie muy digna de ver.

The Blacklist: Para ella va la medalla de plata. Vi el piloto por curiosidad casi sabiendo que al acabar no seguiría con ella. Grave error. No es el mejor piloto del mundo ni mucho menos, pero tiene un algo que te hace seguir viendo más y más. La serie conforme han pasado los capítulos ha ido creciendo exponencialmente, dando una muy buena mezcla entre trama procedimental y trama seriada. Eso,que siempre es un placer ver a James Spader en pantalla pasándoselo estupendamente y la peluca de Megan Boone no tiene desperdicio.

Masters of Sex: Sí, es Showtime, y sí, está muy bien hecha, pero personalmente le doy el bronce. Ha ido ganando peso con sus personajes principales y secundarios, además de la historia que va contando, pero personalmente no me parece tan buena como la pintan en muchos sitios. Eso sí, algo que hace muy bien es la facilidad que tiene para pasar del tono dramático a un tono más cómico, cosas que me recordó mucho a Shameless.

Notable: 

The Originals: Como fiel seguidora de The Vampire Diaries, tenía que ver su spin-off, The Originals. No muy convencida de que que la historia de los vampiros originales pudiese dar para tanto, y menos dejando Mystic Falls, me alegro de haberme equivocado. Se ve que tienen más claro hacia donde quieren ir y como quieren encauzar la trama, además de que han ido surgiendo personajes que pueden dar mucho juego. Pero desde luego no comparto para nada la opinión popular de que The Originals ha superado a su serie madre.

The Tomorrow People: ¿Qué Julie Plec (The Vampire Diaries) y Greg Berlanti (Arrow) tienen una nueva serie? Compro. Si encima el final del piloto me recordó muchísimo a Alias, ya me tenían ganada. Quizá ello pudo ir en contra de mis expectativas al esperarme un gran producto, cuando el resultado es un producto muy ligero pero muy entretenido con conspiraciones, triángulos amorosos, superpoderes y caras bonitas.


Bien/Suficiente: 

Dracula: Esperaba que fuese un despropósito total con efectos cutres, y esa parte, gracias a dios no la cumplió. En cuanto al tema ambientación tampoco puedo quejarme mucho, está logrado. El envoltorio está bien conseguido, pero el contenido es prácticamente vacío. Si no fuera porque ya anunciaron que sería una historia cerrada de 10 episodios y por Jonathan Rhys Meyers, no la habría seguido viendo. Pero el público masculino tampoco tiene que desanimarse, Jessica de Gouw y Katie McGrath son dos buenas razones para verla. El factor eye-candy cumple con sobresaliente.

Atlantis: De más a menos con este estreno británico. El piloto fue el que más me gustó de todos los que había visto: prometía acción, aventura, humor. Y sigue teniendo esos ingredientes, pero los malos efectos especiales no ayudan, además de que los capítulos en ocasiones se hacen muy, muy largos y detalles bastante absurdos. Pero yo me la quedo por mi gusto por la mitología griega y por el protagonista, Jason.

Witches of East End: Quien buscase una serie mamarracha, chorra o trash que abrace su filosofía con ganas, que no busque más, ¡la ha encontrado aquí! Esta serie sabe que es mala y exprime sus ingredientes al máximo: los amoríos, los hechizos que salen mal, la propia familia y los enemigos de esta. Lo que esta serie ha sido capaz de animarme los martes (estos meses, el peor día de la semana) no lo sabe nadie. Estoy deseando ver su segunda temporada que tiene pinta de ser todavía más divertidamente trash.

Almost Human: No, si veo el nombre de J. J. Abrams (incluso si es de forma mínima) no huyo, me quedo y espero lo que se me pueda ofrecer. Aunque en esta ocasión el nombre de peso es J. H. Wyman (Fringe). Y por esa "similitud" con Fringe en su última temporada, había que echarle un vistazo. Claro que, al igual que Fringe, hay que darle unos capítulos de margen para ver que es lo mejor que puede ofrecer, y Almost Human todavía no ha explotado del todo su potencial. La pareja entre John y Dorian funciona, y muy bien, pero falta ver como funciona el resto.


Insuficiente:

Once Upon a Time in Wonderland: 3 capítulos aguanté, y porque soy generosa. Ilusa de mi, ¿qué podía esperar de un spin-off si en su serie madre andan escasos de presupuesto? Exacto. Y cuando pensabas que ya no podías ver más pantallas verdes y decoraciones de cartón o goma espuma, aparece esta serie que da ganas de arrancarte los ojos en el aspecto visual. Bueno, y en historia, nada especial, es la nada.

Agents of SHIELD: Otra con la que aguanté 3 capítulos, y creo que también aguanté demasiado. Para serie de "superheroes" me quedo de lejos con The Tomorrow People, por lo menos esta última es entretenida. A excepción del piloto, lo que me contaban no me interesaba lo más mínimo.  A lo mejor habrá mejorado, muy bien, no seré yo quien la vea.

Hostages: Esta se lleva la palma, el piloto y da gracias. Podía estar bien que fuese una historia corta, pero no. Si a lo mejor hubiese sido una película en lugar de 15 episodios, me habría interesado. Y personalmente, me da pena ver a actores como Toni Collette o Tate Donovan aquí, podrían estar en algo mejor.